El Gobierno vuelve a hacerse un lío con los fallecidos a causa de la pandemia. En las últimas 24 horas se suman 35 que se han producido en la última semana y, además, otros 248 anteriores. Segundo día consecutivo con grandes variaciones después de que ayer la cantidad de decesos sufriera un descenso de casi 2.000 personas.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha explicado los motivos. “En la cifra total hay 283 más que ayer que incluyen esos 35 y casos antiguos a los que había que adjudicarles una fecha de defunción”, ha aseverado. Esta situación tan variable “va a seguir unos días ya que hay algunos cientos de fallecidos a los que hay que ubicar”, ha argumentado Simón. Algunos de estas muertes “se retirarán de las cifras oficiales y otros se sumarán”, ha dicho el político.
El baile de cifras parece que llega hasta las Comunidades Autónomas. Según ha explicado Simón “hay diez que no han notificado ningún fallecido en los últimos siete días, y otras cinco que han notificado sólo uno o dos” en este mismo periodo de tiempo.
Los recuentos llegan a los contagios
El Gobierno vuelve a hacerse un lío con los fallecidos, y con los contagiados. Pese a que de las últimas 24 horas solamente se han notificado 194 nuevos positivos, la cifra total asciende a 236.259. Esto es, se produce un incremento de 859 respecto al cómputo global de ayer. En cualquier caso, a este incremento ha contribuido el repunte en Lérida sobre el que Simón ha expresado que “posiblemente está asociado a un matadero”.
Por último, Simón ha entrado a valorar las manifestaciones celebradas en marzo y los criterios que se usaron para autorizar o no según qué eventos. “Antes del 6 de marzo el ministro de Sanidad firmó una serie de recomendaciones”, ha explicado. Estas, ha continuado, incluían entre otros aspectos “no realizar eventos de masas con participación de personas procedentes de países de riesgo y no celebrar congresos médicos” para que este personal estuviera disponible por si acaso.
Dado que el congreso de evangélicos, ha explicado, contaba con personas de 120 países, algunos de riesgo, se recomendó que no se hiciera. Simón ha reconocido un incremento de casos en Madrid el 9 de marzo, pero estos se tuvieron que infectar a finales de febrero. De esta manera deja fuera el 8M, aunque antes situó un pico de contagios en esa fecha.
