Problemas para dormir y ronquidos suelen ir, casi siempre, juntos en un mismo problema. ¿Qué es la apnea del sueño? Una patología respiratoria cuya principal característica es que las personas que lo padecen roncan habitualmente, tienen paradas en la respiración de forma repetida y arrastran somnolencia durante el día. La consecuencia es lógica es que los pacientes no pueden descansar bien durante las horas de sueño.
Por normal general, cuando las personas duermen la vía aérea está abierta y pueden respirar con tranquilidad. Puede suceder que, en algunas fases del sueño, los tejidos se cierran y bloquean la vía respiratoria. Esto es lo que causa la apnea. Este es el principal motivo por el que aparece esta patología. Sin embargo, existen algunos factores que pueden aumentar el riesgo de padecer apnea.
Uno de ellos es tener el maxilar inferior más corto que el superior. Tener el cuello grande o poseer una lengua que puede retrotraerse hasta bloquear la vía respiratoria son también factores de riesgo. Hay dos más. El primero es la obesidad (el 80% de los pacientes sufren sobrepeso) y, el segundo, tener amígdalas o vegetaciones grandes que pueden terminar por dificultar la respiración.
Síntomas de la apnea del sueño
¿Qué es la apnea del sueño? ¿Cuáles son sus síntomas? La señal más clara que puede poner en alerta sobre la posibilidad de sufrir esta patología son los ronquidos. Las personas que la sufren, normalmente, suelen comenzar a roncar muy fuerte en cuanto se quedan dormidos. Sólo se interrumpe durante el periodo que el paciente sufre la apnea. A ese momento de silencio le siguen soplidos y jadeos mientras trata de volver a respirar con normalidad.
La somnolencia diurna es otra de las señales claras. El sueño de estas personas no es precisamente reparador, por lo que durante el día tendrán ganas de dormir. Incluso pueden aparecer alteraciones respiratorias y fatiga crónica. Estos pacientes suelen levantarse bastantes veces para ir al baño y se despiertan con la boca seca, antes de estar muy cansados al día siguiente. Una de las mejores prevenciones de la apnea es la pérdida de peso. Una dieta equilibrada, dejar de fumar y evitar el alcohol también facilita que no aparezca esta enfermedad.
