Cada vez son más las vacunas disponibles contra el coronavirus, y las que vendrán. Tantos viales están ayudando a acelerar el ritmo de vacunación. Y pese a ello el coronavirus sigue quitando vidas a diario. Esto puede acarrear decisiones drásticas. ¿Me puedo poner dosis de vacunas diferentes? Los antivirales creados no están pensados para mezclarse, pero Sanidad no descarta hacerlo en circunstancias excepcionales. Eso sí, todavía no hay evidencia científica de que esto sea bueno.
Las guías elaboradas para esta campaña de vacunación a gran escala dejan claro que las vacunas están pensadas para completar las dosis con una misma vacuna. Sin embargo, la situación excepcional que está produciéndose podría dar lugar a decisiones importantes. El primer objetivo es inmunizar a la mayor cantidad de población lo antes posible. Y para eso entra dentro de la lógica utilizar el producto que esté disponible en este momento, aunque no sea el mismo con el que se ha inoculado la primera dosis.
Ahora bien, dado que no hay pruebas de cómo puede funcionar esta medida, hay que tener mucho cuidado. Por este motivo, únicamente se plantea administrar una vacuna diferente a la primera siempre que la persona en cuestión pueda exponerse a una situación de alto riesgo de infección. O, en su defecto, si es probable que haya dificultades para poner esa segunda dosis en otro momento. Una única condición, las dos vacunas deben estar basadas en la misma proteína del virus.
Oxford ya lo estudia
¿Me puedo poner dosis de vacunas diferentes? En situaciones excepcionales parece que sí, pero no hay evidencias. Por eso Oxford ya ha iniciado un estudio sobre esta problemática. El trabajo estudia explorar la viabilidad de poder aplicar una segunda dosis de una vacuna distinta a la administrada en primer término. La finalidad es comprobar si esto puede ser viables para flexibilizar, y mucho, los procesos de vacunación.
El estudio, denominado ‘Com-Cov’, contará con 800 voluntarios de más de 50 años para estudiar las posibles combinaciones de las vacunas de Pfizer y AstraZeneca. Estas pruebas se prorrogarán durante los próximos 13 meses. Serán monitorizados todos los participantes para comprobar los posibles efectos adversos de esta mezcla de antivirales. En el caso de que funcione sería una arma muy importante para frenar la pandemia del coronavirus.
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