Los problemas tocan a las puertas de Sevilla con vehemencia. Con más de 100 brotes activos de coronavirus, el virus del Nilo se cobra sus primeras vidas en Andalucía. Se trata de un vecino de La Puebla del Río de 77 años que falleció este jueves, tras estar varios días ingresado en la UCI del hospital sevillano Virgen del Rocío, y una mujer de 85 años cuyo deceso se ha producido hoy mismo. En una localidad de apenas 11.000 habitantes, la noticia ha corrido como la pólvora originando un gran revuelo.
El mayor brote del virus del Nilo que se ha registrado en Andalucía, según recoge ‘El Mundo’, ya afecta a 35 personas de las localidades de Coria del Río y La Puebla del Río. Prácticamente todas (32) están hospitalizadas, seis de ellas graves en cuidados intensivos. En todos los casos los pacientes sufren una meningoencefalitis de mayor o menor gravedad. Hay que recordar que esta enfermedad se transmite a las personas a través de la picadura de mosquitos y que también puede afectar a pájaros, caballos y otros mamíferos.
De hecho, a lo largo de este mes de agosto se han detectado cuatro casos de fiebre del Nilo en caballos, dos en la provincia de Huelva, uno en Jerez de la Frontera (Cádiz) y otro en Dos Hermanas (Sevilla). Además, hay dos casos más sospechosos, uno en Utrera (Sevilla) y uno más en el territorio onubense. Según afirman desde la Organización Mundial de la Salud (OMS), en torno al 8% de las personas infectadas no experimentan síntomas, mientras que el 20% restante sí lo hace. En los casos más graves puede dar lugar a encefalitis o meningitis que, incluso, puede llevar a daño cerebral o la muerte.
Protocolo en marcha
El virus del Nilo se cobra sus primeras vidas en Andalucía y eso que en cuanto se supo del brote se activó un protocolo de contención. En primer lugar se está ejecutando un plan de choque urbano consistente en realizar trabajos, incluida la fumigación, en las zonas verdes habitadas como parques y jardines. Después se hará lo propio en las zonas más limítrofes y finalmente se tratará el entorno natural que rodea los municipios. El objetivo, evidente, alejar al mosquito portador de este virus.
