Li-Meng Yan es una viróloga de Hong Kong que el pasado mes de abril decidió tomar la arriesgada decisión de escaparse de su país. Logró establecerse en Estados Unidos y confesar públicamente sus críticas al Gobierno asiático. El titular es claro: Una viróloga huye y denuncia a China por el Covid-19.
El motivo de su escape no es otro que la información que manejaba sobre la pandemia y el hecho de saber que el Gobierno chino conocía el coronavirus antes de diciembre de 2019. En una entrevista para Fox News, la propia Yan no dudaba en revelar que hubiera podido ser encarcelada o hecha desaparecer de haberse quedado en China. En cualquier caso, cree que su vida todavía está en peligro. Además, Asegura que ella realizó una investigación al comienzo de la pandemia que, de haber sido escuchada por sus superiores y por el Gobierno chino, se podían haber salvado muchas vidas. [Lee: Las mentiras chinas sobre el coronavirus]
Cuando Yan notificó a sus jefes la capacidad de propagación del virus, dice que estos no le hicieron caso y le dijeron que siguiera trabajando. Asegura que comprobó cómo los expertos virólogos que trabajaban en el asunto fueron guardando silencio uno tras otro. Mientras, cada vez más personas enfermaban, «pero no recibían tratamiento o diagnóstico a tiempo». El 16 de enero fue cuando le dijeron directamente que mantuviera silencio y que tuviera cuidado.
Otras mentiras de China sobre el Covid-19
Está claro que su caso recuerda al de Li Wenliang, el médico chino que alertó sobre la entonces conocida como ‘neumonía de Wuhan’. Este fue represaliado por “difundir rumores” y amenazado con siete años de cárcel. Sin embargo, Li falleció la primera semana de febrero a causa del coronavirus que todavía trataba de disimular China. Ahora, el caso de una viróloga que huye y denuncia a China por el Covid-19, no hace más que seguir arrojando sombras sobre la gestión del país. A su vez, quedan sin respuesta los orígenes de la enfermedad y la cifra real de muertos que ha causado.
