Era una noticia tan lógica como esperada, pero no por ello menos alegre. La vacuna Pfizer sí protege contra la cepa británica de coronavirus. Hay que recordar que la variante generada en Gran Bretaña va camino de ser dominante incluso en otros países. Se contagia más rápido y por ello terminará imponiéndose. De ahí, que las farmacéuticas se preocuparan por confirmar la efectividad de sus vacunas frente a las nuevas cepas.
Una investigación desarrollada por IrsiCaixa ha demostrado que, efectivamente, la vacuna Pfizer sí protege contra la cepa británica de coronavirus. Eso sí, añaden a su vez que la inmunidad natural tras superar la enfermedad es más eficaz. Un año después de arrancar la pandemia y con la tercera ola doblegada, el plan de vacunación marcha lento, pero funciona.
Anticuerpos naturales frente a la cepa británica
Un hecho importante reside en que los anticuerpos también mejoran dentro de nuestro organismo. En este sentido, todos aquellos que se infectaron en la primera ola con la variante original del virus de Wuhan, están protegidos de manera natural frente a la cepa británica. Siempre que hayan generado suficientes anticuerpos, claro.
El estudio obtuvo muestras del Hospital Sant Joan de Déu de Manresa y del Hospital Germans Trias i Pujol. Concretamente, de 85 pacientes. 53 de ellos habían superado el Covid-19 de manera natural, mientras que 32 recibieron su segunda dosis de Pfizer. Estos resultados apuntan a que los anticuerpos producidos por el propio cuerpo contra el virus original se refinan con el tiempo y mejoran su capacidad de bloquear las nuevas variantes. Saber que la vacuna Pfizer sí protege contra la cepa británica de coronavirus es una gran noticia, pero quedan cuestiones por resolver. ¿Cuánto durarán los anticuerpos? ¿Ocurrirá lo mismo respecto a otras cepas existentes o futuras? El tiempo dirá.
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