Que un niño se orine mientras duerme es normal. Al menos lo es hasta los tres o cuatro años. A partir de esta edad la cosa cambia. ¿Qué hago si mi hijo aún se hace pis en la cama? Si su edad supera los cinco o seis años podemos estar ante un problema. Es una incontinencia que recibe el nombre de enuresis. Esto significa que el infante todavía no ha conseguido controlar su vejiga. Hay dos tipos. La primaria es cuando ha dejado de mojar la cama por la noche, la secundaria cuando dejó de mojar la cama al menos seis meses seguidos y vuelve a hacerlo por algún motivo.
Las causas por las que esto sucede no se conocen bien. Sigue la búsqueda de los motivos por los que los niños mayores de cinco años siguen orinándose por la noche. Existen varias ideas al respecto. Una de las opciones es la herencia, siendo posible que algún familiar haya sufrido este mismo problema. Estamos, además, ante una situación que afecta más a los varones. La ingesta de mucho líquido por la tarde o noche puede derivar en una mayor producción de orina que termine desembocando en esta patología. La última opción que se maneja, no por ello menos viable, es la existencia de problemas psicológicos causados por conflictos familiares o escolares como por ejemplo el nacimiento de un hermano. [¿La música hace más inteligentes a los niños?]
Puede corregirse la enuresis
¿Qué hago si mi hijo aún se hace pis en la cama? Una de las primeras situaciones es ver la situación con cautela. Cuando se produzca este problema es muy importante no reñir ni castigar al niño por orinarse. Tiene un efecto corrector mucho mejor felicitarle por las noches en las que la cama acaba seca o por el esfuerzo que hace en corregir esta situación.
Aunque suene atípico tratándose de niños pequeños, existen ejercicios de rehabilitación. El entrenamiento del suelo pélvico fortalece los músculos implicados en el control de la orina. Una de las posibles causas de que esto suceda es la excesiva ingesta de líquidos en la tarde o o noche. Por eso es conveniente evitarla, así como el consumo de bebidas con cafeína por la acción diurética que pueden causar. Por último, el uso de alarmas que despierten al niño y le recuerden que debe ir al baño es otra alternativa para corregir la enuresis, pero debe ser un último caso.
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