Llega el buen tiempo y, mientras los amantes del sol acuden a la playa, otros prefieren el senderismo o la montaña. Especialmente para este segundo grupo es muy interesante una serie de consejos. Saber qué hacer si te pica una garrapata puede salvarte de muchos problemas.
Lo primero que debes saber es que la garrapata es un parásito que se alimenta de la sangre de los animales. Los hay de varios tamaños y la media oscila entre los tres milímetros y el centímetro. Existen centenares de tipos y en su mayoría son inofensivos, aunque a veces pueden transmitir enfermedades. Para hacer una idea, es el animal que más enfermedades transmite a los humanos en Europa. En el mundo, sólo el mosquito le supera en esta tarea.
Vas paseando con tu perro o con tus amigos por el campo y de repente, una garrapata se lanza al abordaje de tu cuerpo. Ni te das cuenta, ya que no lo hacen necesariamente saltando a tu cara o manos, sino a cualquier parte de ti, tras simplemente rozar la rama en la que estaba posada a la espera de un huésped. Ahora, ese huésped eres tú. Una vez posado en ti, buscará un lugar caliente y húmedo, siendo normalmente los pliegues (sobaco, nalgas, genitales, orejas…).
¿Qué consecuencias puede tener su picadura?
Lo normal es que no pase nada si te pica una garrapata y menos en lugares como España, pero puede ser. En caso de infección, hay riesgos de fiebre botonosa mediterránea (tifus de la garrapata), también de la enfermedad de Lyme, inflamación de ganglios o babesiosis (infección de los glóbulos rojos) entre otras.
¿Qué síntomas puedes mostrar si te pica una garrapata?
Los efectos de la picadura no suelen ser inmediatos y pueden tardar incluso un mes en aparecer. Vamos con algunos posibles:
- Zona enrojecida o sarpullido.
- Fiebre.
- Dolor intenso en la zona.
- Dolor de cabeza.
- Rigidez en el cuello.
- Dolores musculares o de articulaciones.
- Sientes una debilidad muy agudizada.
- Cierta descoordinación.
- Náuseas y vómitos.
- Diarrea.
- Sensación griposa.
¿Qué hacemos si creemos que nos ha atacado una garrapata?
Si al poco de estar paseando por el campo o en el monte (o con animales que lo han estado), empezamos a notar varios de esos síntomas, pongámonos en guardia. Ya sabemos que la fiebre es señal de que nuestro cuerpo está luchando contra alguna infección. Desnúdate frente al espejo y busca una señal visual de picadura de garrapata. Podría estar incluso en el cuero cabelludo. No te rasques con fuerza la cabeza.
¿Cómo la extraigo?
Si lo detectas, debes extraerlo lo antes posible. Suele ser algo sencillo que puedes hacerlo tú mismo sin problemas y generalmente basta con unas pinzas de punta fina. Vamos, debería valer con las típicas que se emplean para extraer pelos sueltos. Si está en una zona a la que no llegas bien, pide ayuda. Es importante extraer el parásito por completo. Lo enganchas con las pinzas cuidadosamente y lo extraes con suavidad, sin girar ni retorcer la pinza. Evitemos que se parta o aplaste su cuerpo al sacarlo. Procuremos que no quede nada de la garrapata dentro.
Después de la exitosa extracción, limpiemos la zona con bien de agua y jabón para, posteriormente, aplicar un antiséptico. Para estar doblemente seguros, sería prudente introducir la garrapata en un botecito con un poco de papel húmedo y, si mantenemos o empeoran los síntomas (deberían irse con antibiótico), tendremos que acudir al médico y tratar de llevar la garrapata para que la analicen.
Ojo, consejo, ahora que sabes lo que tienes que hacer si te pica una garrapata, bajo ningún concepto te dejes llevar por esos ‘trucos caseros fake’. Hay quien habla de aceite, cerillas encendidas como fuente de calor, vaselina o esmalte. Puedes lograr el efecto adverso.
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