La homeopatía es un método terapéutico que se basa en la ley de similitud, ¿pero qué es exactamente?. Este método afirma que una sustancia que produce síntomas concretos en un paciente sano, en pequeñas y controladas cantidades, puede curar los mismos síntomas en una persona enferma. El 10 de abril es el Día Internacional de la homeopatía.
Desde sus inicios, la homeopatía ha sido objeto de debate entre los expertos en salud. Entre médicos, farmacéuticos y demás especialistas, son muchos los detractores, pero también hay defensores de esta pseudociencia internacional.
Los productos que se utilizan para elaborar los medicamentos homeopáticos pueden ser de origen animal, vegetal o químico.
Según los practicantes de la homeopatía, este método puede prevenir e incluso tratar algunas enfermedades agudas o crónicas, así como ayudar a tratar infecciones de repetición e incluso beneficiar los cuidados paliativos. Por otro lado, desde otros sectores de la medicina tradicional, no son pocos los expertos y estudios que la señalan como una serie de teorías que van en contra de la ciencia. En cualquier caso, la Organización Mundial de la Salud desaconseja su uso para el tratamiento de enfermedades importantes. La OMS señala concretamente ejemplos como sida, tuberculosis, malaria, la diarrea infantil o la gripe.
“Un complemento que puede ayudar a la medicina tradicional en algunos casos concretos”
El Dr. Bengoa, otorrinolaringólogo licenciado en la Universidad de Navarra, considera la homeopatía como “un complemento que puede ayudar a la medicina tradicional en algunos casos concretos”.
Origen de la homeopatía
La homeopatía tiene su origen Alemania. Concretamente sus inicios se le deben a Samuel Hahnemann, un médico que vivió a finales del siglo XVIII e inicios del XIX. Este innovador científico expuso la ley de similitud en la que se basa este método terapéutico. Este médico, que vivió 88 años (muchísimo para la época), defendía que leves dosis de algunas sustancias que producían ciertos síntomas podían lograr efectos curativos.
