El verano se acerca a pasos agigantados y, con él, el calor. En exceso puede ser causa de lipotimias o de desmayos. ¿Por qué se produce una bajada de tensión? Sucede cuando la presión arterial es mucho más baja de lo normal, por lo que el corazón, el cerebro y otras partes del cuerpo no reciben suficiente sangre. El nombre médico de esta patología es hipotensión. En su origen podemos encontrar varios motivos.
Primero hay que tener en cuenta que cada persona es diferente. Una misma bajada de tensión habrá quien no la note y otras personas caerán redondas al suelo. La hipotensión grave puede estar causada por una pérdida súbita de sangre, una infección grave, un ataque al corazón o una reacción alérgica intensa. Por su parte, la hipotensión ortostática suele deberse a un cambio repentino y brusco en la posición del cuerpo. El mejor ejemplo es levantarse bruscamente después de estar tumbado. Por último también está la hipotensión mediada neuralmente (HMN), que afecta con más frecuencia a adultos jóvenes y niños.
Causas de la hipotensión
¿Por qué se produce una bajada de tensión? Puede ser por diferentes motivos, vamos a ver los más habituales. Hay determinados medicamentos y varias sustancias que pueden derivar en el descenso de la presión arterial. Entre los fármacos encontramos los ansiolíticos, algunos antidepresivos, los diuréticos, ciertos medicamentos para el corazón y para tratar la hipertensión o los analgésicos. Entre las sustancias, como no podía ser de otra forma, está el alcohol. Hay más motivos. Por ejemplo las arritmias, la deshidratación, una lesión nerviosa a causa de la diabetes o padecer insuficiencia cardíaca.
Los síntomas de la hipotensión también son variados. Los más comunes son a visión borrosa, la confusión o el vértigo. También están los más conocidos como el desmayo (o síncope) o los mareos. La debilidad, la somnolencia o las náuseas también forman parte de las señales inequívocas de esta enfermedad.
