Adelgazar es uno de lo propósitos más habituales de cada año, sea por nuevo curso, Navidad o cumpleaños. Pero también lo es el clásico “voy a dejar de fumar”, “este año me apunto al gimnasio” y demás. Si por un casual eres capaz de proponerte adelgazar mediante el ejercicio, es bastante común que luego surja una pregunta: ¿Por qué no adelgazo haciendo deporte?
Como ya te hemos contado en otros artículos, la única manera posible de adelgazar pasa por el déficit calórico. Esto quiere decir que debes quemar más calorías de las que consumes, ya sea por lograr que tu cuerpo queme más o por meterle menos. La clave es el equilibrio, ya que de poco sirve darte una paliza mañanera en el gimnasio si a la vuelta te esperan un plato de macarrones tres quesos y un filete con patatas o si por la noche te bebes tres copas de tu alcohol favorito. [¿Cuántas calorías tiene el alcohol?]
Bien, resulta muy común que si realizamos deporte, nuestro cuerpo nos pida más comida después. El apetito va por libre, por lo que hay que intentar ‘educarlo’. La fuerza de voluntad es clave en estos casos, ya que el fin que perseguimos es mayor que el placer de tomarnos dos cervezas con sus correspondientes cacahuetes salados.
Adelgazar según el deporte que practiques
Querer adelgazar no nos debe convertir en una calculadora de calorías humana, basta con que el sentido común impere. Si te preguntas por qué no adelgazas haciendo deporte, debes entender que todo ayuda, pero hay que ser conscientes de que realizar un simple paseo o una sesión de yoga o pilates es muy sano y nos viene de lujo, pero adelgazar, adelgaza más bien poco. En este sentido, te recomendamos que leas el artículo: ¿Con qué deporte quemas más calorías?
