La angustia de España y, en general de toda la Unión Europea, ha durado menos de una semana. Exactamente seis días. Este es el tiempo que ha pasado desde la paralización del proyecto hasta el anuncio de que Oxford reanuda los ensayos de su vacuna. Un auténtico respiro para los países, como España, que ya habían comprado millones de dosis del viral e incluso tenían ya planes de vacunación. La iniciativa se había detenido después de uno de los participantes sufriera “una enfermedad potencialmente inexplicable”. En concreto se trataba de una mielitis transversa, una grave inflamación de la médula espinal.
El comunicado de la propia Universidad de Oxford asegura que los “ensayos clínicos controlados aleatorios en curso de la vacuna contra el coronavirus de Oxford ChAdOx1 nCoV-19 se reanudarán”. Y lo harán en todos los lugares “de ensayos clínicos del Reino Unido”. Cabe recordar que el proyecto también se estaba probando en Estados Unidos, Brasil y Sudáfrica. El pequeño parón parece ser un procedimiento habitual. Unas 18.000 personas han recibido las vacunas del estudio como parte del ensayo. En proyectos tan grandes, añade el comunicado, “se espera que algunos participantes se sientan mal y cada caso debe evaluarse cuidadosamente para garantizar la seguridad”.
Investigación independiente de la vacuna de Oxford
Oxford reanuda los ensayos de su vacuna una vez finalizada la investigación independiente que se inició al descubrir el caso de mielitis transversa. El pasado domingo es cuando se frenó la iniciativa de la citada universidad y la farmacéutica AstraZeneca. El mismo comunicado reza que ahora ha finalizado el proceso independiente y, siguiendo las recomendaciones del comité de revisión y del regulador del Reino Unido (MHRA), “los ensayos se reanudarán en el Reino Unido”. Como es lógico, por motivos de confidencialidad no pueden divulgar información sobre el participante.
Hay que recordar que este es uno de los proyectos más avanzados de cara a inmunizar a la población. La Unión Europea adquirió los derechos sobre 300 millones de dosis. De ellos, unos 30 llegarían a los países a principios de diciembre, tres de ellos para España. El plan de vacunación previsto para nuestro país, por fortuna, parece haber sufrido un parón mínimo.
