La pandemia está absorbiendo la mayoría del tiempo de los sanitarios de todo el mundo. En plena primera ola se redujeron notablemente las intervenciones quirúrgicas no esenciales. Pero hay algunas que sí lo son y no pueden dejarse de lado aunque haya comenzado la segunda oleada del coronavirus. Este es el caso de Charlotte Evans, una joven británica de 19 años. Desde 2013 sufre una dolencia que todavía no ha sido diagnosticada. No será por los esfuerzos. La adolescente está ya operada 66 veces por una rara enfermedad que sigue sin saber de dónde proviene.
Su caso se ha convertido en un auténtico misterio para los profesionales, según relata la BBC. Esta rara patología provoca que se le hinchen diferentes partes de su cuerpo, en algunas ocasiones, durante meses. La joven ha tenido que pasar las citadas 66 ocasiones por quirófano para aliviar la presión de las inflamaciones. Pese a sus esfuerzos, la afección sigue siendo un rompecabezas sin solución para los doctores. Una de las peores situaciones se produjo en marzo de 2019 cuando la joven estuvo a punto de perder una pierna.
Un dolor de cabeza inició todo
La pesadilla de esta mujer operada 66 veces por una rara enfermedad comenzó unos años antes. Un simple dolor de cabeza lo inició todo. Lejos de remitir, casi de inmediato le siguió una hinchazón de estómago, espalda y pierna. Tanto fue que Evans ingresó en un centro hospitalario. Allí permaneció los tres meses siguientes sin que los doctores dieran con una explicación a su dolencia.
Lo intentaron. A los dos meses se le llegó a diagnosticar síndrome compartimental tras la inflamación de una mano. Esta afección surge cuando se produce un aumento de la presión en un compartimento muscular que puede llegar a causar daños en los nervios y problemas en el flujo sanguíneo. Esto originó la primera de las operaciones, pero el problema no desapareció. Es más, incluso aumentó obligando a la joven a permanecer largas temporadas en la cama de un centro hospitalario. En una de ellas alcanzó los siete meses sin salir del hospital. La pesadilla continúa. En lo que va de 2020 ya ha sufrido ocho episodios inflamatorios. Y lo peor es que, pese a recibir un tratamiento que parece efectivo, cada vez son más graves.
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