La situación no es buena, es una evidencia. No hay que ser un experto para saber que con más de 200 brotes de coronavirus la cosa no está controlada. Ahora bien, sí hay que serlo para vaticinar, con datos en la mano, que España va derecha a una nueva oleada de casos. Un neumólogo augura esta segunda ola en un mes, o incluso antes. En su cuenta de Twitter ya vio venir antes que nadie la problemática del virus, y ahora prevé los riesgos de la relajación que se está viendo en la gente.
En su cuenta, @donni_69, lo deja muy claro. “Mi opinión es que en menos de un mes tendremos aquí la segunda ola”. Ahora bien, será diferente a la que pilló de improvisto a la sanidad en marzo. “Será más suave y de inicio más lento porque usamos mascarillas, mantenemos la distancia social, diagnosticamos antes y trazamos contactos”. Y pese a todo esto esta segunda oleada “es inevitable”.
Neumólogo en un hospital del sur de Madrid, ha mostrado su preocupación por el nuevo avance del coronavirus. La fórmula de este aumento de contagios es muy sencilla. “Transmisión comunitaria + mal seguimiento de contactos + población imprudente = SEGUNDA OLA EN BREVE”, cita en su cuenta de Twitter.
Abocados al confinamiento
Un neumólogo augura la segunda ola en un mes y va más allá. “Nadie sabe lo que pasará pero estamos abocados al confinamiento de nuevo. En todo el territorio”, ha manifestado, aunque espera equivocarse. Respecto a la población confiesa que, en general está bien, cumpliendo la normativa y renunciando a libertades por el bien común. Sin embargo “el uso de mascarillas se relaja, la vida social a tope, las vacaciones implican movilidad interprovincial. Vale. Es lógico. Es humano. Pero, ¿nos hemos olvidado de los muertos ya?”, continúa diciendo.
La única buena noticia de esta segunda ola es que “la mortalidad será más baja”. Eso se debe a que “diagnosticamos más y tratamos mejor. Porque tenemos más ventiladores y más camas de uci. Porque estamos protegiendo más a nuestros mayores”. Por todo esto asegura que “no hay que entrar en pánico: os recuerdo que es ‘sólo’ del 1% de todos los casos”, señala en referencia a la mortalidad. Finaliza esperando que el sistema de salud aguante el tirón y que, antes de llegar al colapso, los “gobernantes y jueces actúen”. Y es que los sanitarios ya han vivido un infierno y “vemos venir otro más y parece que a nadie le importa”.
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