Al principio de la pandemia surgieron muchas preguntas que poco a poco van obteniendo respuesta. Hace escasos días se esclarecían los motivos por los que el coronavirus atacaba más a las personas más mayores y a las inmunodeprimidas. Otra gran cuestión es la de encontrar los motivos por lo que esta enfermedad afecta con más dureza. Obviamente existen factores de riesgo como sufrir alguna patología previa, pero hay otros valores en esta ecuación. Ya se dijo que el grupo sanguíneo influía. El último estudio va más allá y habla de que los síntomas gastrointestinales auguran un Covid-19 grave.
Los investigadores de la Universidad Riverside de California han logrado, de esta manera, identificar un nuevo biomarcador que facilita la infección causada por el SARS-CoV-2. Su trabajo, publicado en medRxiv, evidencia que los síntomas gastrointestinales se asocian no sólo con una mayor gravedad del coronavirus, también con una duración más grande. En sus análisis, casi la mitad de los cuadros más severos (un 46%) sufrió estos síntomas. Es más, el 33% ellos no presentó ningún problema respiratorio, que suelen ser los más normales en el Covid-19.
Entre los síntomas gastrointestinales más comunes están los vómitos, las náuseas y la diarrea. Estudios realizados en China también han revelado que los pacientes que han sufrido los problemas gastrointestinales no sólo han desarrollado cuadros más graves, también han terminado por sufrir fiebres más elevadas (superiores a los 38,5 grados) y tasas más altas de daño hepático.
¿Transmisión fecal?
Los síntomas gastrointestinales auguran un Covid-19 grave. Uno de estos síntomas es la diarrea. Una circunstancia que ha hecho que se estudie la posibilidad de una transmisión fecal. De momento no existe ninguna prueba que corrobore tal extremo. No obstante, sí que se ha podido comprobar que el virus puede encontrarse en las aguas residuales. De hecho, son muchos los países que están analizando sus redes de alcantarillado para tratar de dar con posibles brotes del patógeno incluso antes de que aparezcan. Valencia es una de las ciudades que está haciendo este estudio.
