Las mujeres españolas encabezan la lista nacional de uso de la copa menstrual. Cuatro bases fundamentales para ello. La comodidad, la seguridad, el ahorro y el respeto por el medio ambiente son los beneficios de la copa menstrual por los que las féminas optan por este producto durante su periodo de menstruación.
De hecho, aunque parezca un producto nuevo, los primeros salieron a la venta en los años 30. En la actualidad, más de ocho décadas después, nos encontramos ante una de las principales opciones para las mujeres, sobre todo por ser muy ecológico.
¿Por la ecología?. Así es. Hasta 100 mil millones de compresas y tampones son desechados cada año en todo el mundo. Y muchos de ellos terminan en las aguas de los mares. No es ninguna tontería puesto que los materiales con los que están fabricados afectan gravemente al ecosistema.
Sin embargo, la mayoría de copas menstruales están elaboradas con silicona médica. No solamente eso, también son reutilizables y se lavan únicamente con agua.
Estudios recientes
Además, estudios bastante recientes, confirman más beneficios de la copa menstrual. Son seguros y tampoco muestran efectos adversos hacia la flora vaginal. Esto sucede porque al recoger el flujo menstrual en lugar de absorberlo, la copa evita que éste entre en contacto con las paredes vaginales. Así se impide que se produzcan infecciones.
En cuanto a la comodidad, pese a que al inicio pueda parecer más difícil de usar, en realidad termina siendo tan fácil que tres de cada cuatro mujeres admiten que seguirán usándola.
Finalmente en lo que respecta al ahorro, la copa menstrual es una alternativa mucho más económica que las ya citadas de los tampones y las compresas. Esto se debe a que tiene una vida útil de cerca de una década. Esto, a la larga, supone un ahorro considerable.