Localizar los nuevos brotes de coronavirus se ha convertido en una obsesión. Los más de 150 repuntes que ya se han dado en España están causando una preocupación importante, especialmente en Cataluña y Aragón. Tanto es así que el Gobierno ya rastrea zonas de baño interiores para detectar estos rebrotes. El proyecto también incluye el análisis de una treintena de depuradoras de aguas residuales. Se trata de una medida que trata de detectar con la mayor precocidad posible posibles repuntes de Covid-19.
Esta medida, según han explicado desde el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfica (Miteco), se prolongará durante meses, según recoge la ‘Cadena Ser’. La iniciativa complementa a la puesta en marcha por las administraciones locales y autonómicas para el control de la propagación del coronavirus. Algo que se realiza mediante el muestreo periódico de la concentración de restos de virus en el agua. Valencia fue la primera ciudad en aplicar esta medida. Poco después un estudio dejó entrever que en las aguas residuales de Barcelona había restos del virus desde marzo de 2019.
El gran objetivo es identificar la presencia de personas infectadas. En el caso de las depuradoras lo hará a través del análisis de fragmentos del ARN del SARS-CoV-2 en las aguas de la entrada de estos complejos y en ciertas zonas de baño de aguas continentales. La toma inicial de muestras en las zonas de baño seleccionadas comenzó el pasado 22 de junio. Por su parte, los rastreos en las primera estaciones depuradoras de la Comunidad de Madrid, País Vasco, Galicia, Extremadura, Navarra y Asturias empezará la próxima semana.
Proceso de selección
El Gobierno rastrea zonas de baño para detectar rebrotes después de un largo proceso de selección. Las depuradoras se han elegido atendiendo a criterios de movilidad e interconexión entre poblaciones, mayor afluencia de turismo, poblaciones favorables a la expansión de la enfermedad, el impacto de la enfermedad o la climatología.
En las zonas de baño, lo que se ha tenido en cuenta en la afluencia de bañistas, los resultados previos sobre la calidad de las aguas, el caudal y las características del cauce, la temperatura del agua y la representatividad geográfica. En ambos casos, el muestreo abarca a todo el territorio nacional. Sin embargo, los puntos de control ya marcados podrían modificarse para adaptarse a la evolución de la epidemia en las distintas regiones, según indican desde Miteco.
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