Las medidas para evitar la propagación del coronavirus son cada vez más drásticas. Primero fue el uso obligatorio de la mascarilla incluso en espacios abiertos y pese a mantenerse la distancia de seguridad. Después el cierre del ocio nocturno, culpable de buena parte de los brotes que sufre España. Ahora se ha dado luz verde a alguna opción que los expertos e incluso el Gobierno ya manejaban. Galicia prohíbe fumar en la calle y las terrazas. El humo del tabaco, e incluso el de vapear, puede ser un vector importante de transmisión del virus y es mejor cortar por lo sano.
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, así lo ha anunciado. Un único condicionante, según recoge ‘El País’. Esta prohibición será estricta siempre que no se mantenga la distancia de seguridad. La medida ha sido recomendada por los expertos, quienes consideran que el humo del tabaco supone un alto riesgo para la difusión del virus. Es la primera autonomía, y seguramente no sea la última, que implanta esta drástica medida.
El propio Feijóo lo ha explicado. “Se trataría de prohibir fumar en las calles o lugares públicos donde no es posible mantener la distancia física de seguridad”, ha manifestado. El político ha continuado diciendo que cuando “se está en tránsito y en movimiento, el humo puede perjudicar a personas colindantes o a las de círculos cercanos”. Esta estricta normativa entrará en vigor este mismo jueves.
Riesgo latente
El riesgo es muy claro y por eso Galicia prohíbe fumar en la calle y las terrazas. La explicación también es evidente. Al exhalar el humo, el fumador lanza esas pequeñas gotas a los acompañantes, además de que puede manipular la mascarilla y llevarse los dedos a la boca tras tocar los cigarrillos. La cachimba, con presencia habitual en el ocio nocturno, también se ha convertido en un peligro. Hace más de un mes que el ministerio de Sanidad recomendó no fumar en las terrazas. La decisión gallega le termina dando la razón.
La medida es dura pero hay un dato a favor. En los últimos meses, y precisamente debido a la imponente presencia del Covid-19, el tabaquismo había caído en España. Habrá que esperar que la nueva norma se cumpla a rajatabla.
