La detección de las personas asintomáticas con la suficiente rapidez para evitar la propagación del virus es uno de los objetivos vitales en la desescalada. El análisis de las aguas residuales y la potenciación de los servicios de Atención Primaria están ayudando a controlar, de mejor o peor manera, los rebrotes que están dándose. Ahora aparece otra iniciativa. España junta en uno sólo las PCR y los test rápidos. Un nuevo método que une la velocidad en el diagnóstico con la fiabilidad de las pruebas más amplias.
Este nuevo método español va a permitir diagnosticar de una forma portátil, fiable y rápida la presencia del SARS-CoV-2, según recoge ‘La Vanguardia’. Esta herramienta ha sido diseñada por investigadores de las universidades de Granada y la Complutense de Madrid, en compañía de la biomédica Atrys Health. El dispositivo analizará las muestras de exudados nasofaríngeos, como hace la PCR, de los pacientes sospechosos.
Bautizada como ‘RAP-ID19’, las principales características de esta nueva herramienta son su elevada sensibilidad, la especificidad, su fácil utilización y su amplia portabilidad. Y eso sin olvidar las dos más importantes, su bajo coste y su brutal rapidez ya que los resultados se conocen en menos de 15 minutos, igual que en los test rápidos.
Pensado para aeropuertos
España junta en uno sólo las PCR y los test rápidos, y lo hace pensando sobre todo en ponerlo en marcha en aeropuertos y en la calle. También podrían realizarse en oficinas o los centros de Atención Primaria. Su bajo coste y su enorme fiabilidad hacen factible que pueda llegar a todos los niveles de la sociedad. Además de las ventajas ya citadas, los expertos ven algunas más. Y esta no es otra que podrán realizarse sin necesidad de personas entrenado o de laboratorios especializados.
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