Una de las hortalizas más sanas y con más propiedades beneficiosas. Introducido en Europa desde el Nuevo Mundo por españoles y portugueses, ha resultado ser un enorme descubrimiento. Sin duda, el calabacín es la estrella. Es un alimento ideal con un bajo contenido calórico (100 gramos tienen unas 20 calorías); casi no tiene grasa; está repleto de agua; fibra y minerales como calcio, potasio, sodio o fósforo; y cuenta con vitaminas como la B6, A y C. Incluso contiene nutrientes que ayudan a mejorar la visión. Un auténtico multiusos en cualquier dieta.
Para extraer todos sus beneficios, el calabacín debe ser cocido al vapor, aunque también se puede comer crudo y es preferible no quitarle la piel. Y muy importante, es infinitamente mejor comerlo fresco para aprovecharse de todas sus propiedades. Hay muchas variedades, algunas como el amarillo puede comerse incluso crudo. Esta hortaliza tiene posibilidad de numerosas combinaciones culinarias.
Los beneficios del calabacín
¿Por qué el calabacín es la estrella? Sus beneficios abarcan numerosas situaciones. Ayudan a la pérdida de peso debido a su combinación de fibra, agua y pocas calorías. Es un alimento muy apto para las dietas de control de peso. Además, por su alto contenido en fibra tiene un efecto saciante, por lo que ayuda a controlar el apetito. Esto tiene una consecuencia directa sobre el colesterol. Sus altos niveles de vitaminas A y C también contribuyen a disminuir el riesgo de aterosclerosis.
Los calabacines son también de gran ayuda para reducir la tensión arterial ya que el potasio y el magnesio que contienen benefician a quienes sufren hipertensión. Gracias a dos fitonutrientes (luteína y zeaxantina) también reporta beneficios para la vista protegiendo los ojos de los dañinos rayos solares y previniendo la degeneración macular causada por la edad. El corazón también saca tajada. Precisamente por el potasio se reducen los efectos nocivos de la sal en el organismo, disminuyendo el riesgo de accidentes vasculares y enfermedades cardíacas.
Finalmente no sólo puede prevenir el envejecimiento, gracias a que es una gran fuente de ácidos grasos Omega-3 y carotenos con propiedades antiinflamatorias ayuda a controlar el exceso de ácido úrico. Algo que, entre otras cosas, ayuda a reducir los riesgos de sufrir la gota.