Una vez más, los datos dejan en evidencia la situación de la pandemia oficial. El último informe de vigilancia y exceso de mortalidad del Instituto de Salud Carlos III evidencian que España sufre la segunda oleada de muertes por Covid-19 y de paso contradice los muertos oficiales del Gobierno. Desde el pasado 27 de julio, en sólo tres semanas, 2.540 personas han fallecido de más con respecto a la media histórica de la última década. Esto supone un 12,6% de lo estimado en años anteriores.
El informe, que recoge ‘ABC’, ofrece datos reveladores. El exceso de mortalidad durante la primera ola de la pandemia se cifró en 43.556 fallecidos, un 64,3%. Pese a la enorme diferencia entre estos datos y los de la segunda ola que constata el citado instituto, hay un dato que empiece a estremecer. El número de decesos que podrían atribuirse al coronavirus rondan los 125 al día desde hace unas cuatro semanas, según los investigadores del mencionado Carlos III.
Esta segunda oleada de fallecimientos está afectando en mayor medida a las mujeres. Mientras que en la primera ola murieron más varones, la actual está resultando mucho más letal para las féminas. En concreto, desde finales del pasado mes de julio han fallecido 1.747 mujeres, mientras que los decesos entre los varones llegan hasta las 970 víctimas. Nada que ver con las cifras que se produjeron desde marzo donde faltaron 21.636 hombres y 21.544 mujeres. El Carlos III contradice los muertos ‘oficiales’ del Gobierno por Covid-19 como ya hicieran en el pasado tanto funerarias como el INE. Hay que recordar también que el propio MoMo se actúa sobre el 93% de los datos, mientras que el Instituto Nacional de Estadística sobre el 100%. Ambos rondan los 50.000 decesos por coronavirus en España.
Perfil de los muertos por Covid-19
España sufre la segunda oleada de muertes por Covid-19, pero hay algo que no cambia, los mayores siguen siendo los más afectados. Del total de fallecidos desde julio, 2.160 son mayores de 74 años; otros 159 tenían entre 65 y 74 y sólo 130 eran menores de 65 años. Resumiendo, el exceso de mortalidad hasta la fecha eleva la cifra de fallecidos a 46.096 de acuerdo con las estimaciones del Carlos III en su informe conocido como MoMo. Este dato se sitúa lejos de los 29.000 muertos reconocidos oficialmente cuyos decesos se achacan directamente al Covid-19.
Las cifras se antojan hasta comprensibles después del considerable aumento de contagios que se ha producido en agosto, hasta un 344% más que en julio. La edad media de los infectados ha bajado, pero cuando esos jóvenes acuden a reuniones familiares es cuando aparecen los problemas.